jueves, 29 de abril de 2010

DE MI MISMA: ALGUNAS COSAS


LLevo todo el día pensando. Pensando demasiado. Hasta tal extremo que en un momento dado perdí el objeto de ese pensamiento.

Creo que saco adelante demasiadas cosas...pero ¿Que significa eso?

Tal vez es el hecho de estar cansada, de sentir que necesito una parada...pero ¿Respecto a qué?

Esto me ocurre con todo lo que pienso.

Pienso en abandonar a ese hombre y me aburro, pienso en conocer a otra persona y me aburro, pienso en la soledad y me abate el hastío. 

¿Será la primavera?

Nuevas experiencias ¿Qué experiencias?

Gente interesante. Vivo rodeada de gente apasionante, de personas con historias increibles, con mentes prodigiosas, con corazones de vértigo.

Y todo ello lo aderezo con la capacidad de sobrellevar una rutina y de ser capaz de destruirla en un solo parpadeo.

Tengo todo.

No soy fea.

No soy tonta.

Soy creativa.

Soy.

Soy

¿Que soy?

¿Que quiero?

Quiero dormir y me acuesto tarde y despues me quejo.

No. No.

Llevo todo el día pensando y me pierdo en el objeto de mi propio pensamiento.

Hoy no hay nada capaz de conmoverme.

Ni el arte,

ni el sexo,

ni tú.

lunes, 26 de abril de 2010

DE PIELES PARA VENUS: COMIENZOS


 Tu cuerpo inhóspito vomita los recuerdos conjurando al pasado

 para hacerlo volver,

 pero no hay calor, solo dos pieles temblando,

dos pieles ciegas buscando combustión y calambres que no dejen cicatrices,

 que permitan esta vez, mantener la condena de los besos sin reproches,

 el consuelo de una voz visionaria que susurre:

  -Para siempre.

Pero no llega el minuto,

el instante de captura al corazón sin nudos,

y solo están nuestras manos 

buscándonos a tientas detrás de las palabras,

 el contacto patológico de dos gargantas derramando alambre,

 la urgencia desmembrada y la ceguera.

 

Yo clamo a tu cuerpo desde la órbita profunda,

 me consumo en el grito de tu nombre,

y espero  acechante que el milagro ocurra,

que tus ojos me lleguen con la luz intacta al centro de las pupilas,

que continúe la historia,

       que el Amor comience.

DE CARTAS A MILLER: CRECIENTE


Está escrito sobre tu piel,

sobre mi piel.

Está escrito en nuestras lenguas que profieren el insulto,

en nuestras lenguas que remueven la saliva.

Está escrito,

es irremisible,

irreversible

y pase lo pase

está escrito.

Tu y yo,

Ambos.

Enfrentados,

en este amor

pequeño

que perdura

como una cicatriz 

que vuelve a abrirse

vez

tras 

vez

y duele.